Discrepancias con la playa para perros

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El Ayuntamiento de Torrevieja va a habilitar un nuevo espacio de baño para perros en la zona sur de Torrevieja (Cala Rocío), que se encuentra ubicado entre Cala Ferris y Rocío del Mar, y que va a sustituir a las dos pequeñas zonas que fueron creadas en 2018 por el anterior equipo de Gobierno y que desde su apertura ha provocado continuos conflictos entre vecinos y dueños de perros.

Después de varios meses de trabajo por parte de las concejalías de Playas y de Protección Animal, que dirigen Antonio Vidal y Concha Sala respectivamente, se ha decidido finalmente este espacio como el más adecuado, accesible y que no va a suponer conflicto alguno entre los dueños de perros y los vecinos.

El alcalde, Eduardo Dolón, ha anunciado que esta nueva zona de recreo será exclusiva para perros y mejorará los dos espacios que existían, de difícil acceso, más pequeñas y sin ningún tipo de señalización ni servicios para el disfrute de las mascotas.

TORREVIEJA CONTARÁ CON UN NUEVO ESPACIO DE BAÑO EXCLUSIVO PARA PERROS CON MÁS DE 1.600 METROS CUADRADOS DE SUPERFICIE

Nueva zona destinada al baño de las mascotas.

Se trata de un espacio con más de 1.600 metros cuadrados de superficie, con buena accesibilidad, y que va a contar con una señalítica especial (en español y en inglés) con todas las recomendaciones, derechos y obligaciones de los usuarios, así como las medidas existentes previstas en la actualidad con motivo del COVID-19. Además, el equipo de Gobierno pretende dotar este espacio de baño para perros con un vallado, espacios de sombra y enganches para los canes.

Se encuentra ubicado entre Cala Ferris y Rocío del Mar, y va a sustituir a las dos pequeñas zonas que fueron creadas en 2018 por el anterior equipo de Gobierno y que desde su apertura ha provocado continuos conflictos entre vecinos y dueños de canes

El alcalde ha informado que el concejal de Playas del Ayuntamiento de Torrevieja, Antonio Vidal, está en contacto con el Servicio Provincial de Costas para obtener los permisos necesarios para la instalación de una zona de juegos para perros -Agility-. Eduardo Dolón ha indicado que la pretensión del Ayuntamiento es convertir estos más de 1.600 metros cuadrados de litoral en una atractiva y exclusiva zona de ocio y esparcimiento de perros.

playa para perros en Torrevieja pets friendly dogs beach
Zona para perros situada entre Cala Ferris y Cala Rocío.

Por otra parte, Andrés Navarro Sánchez, portavoz del Grupo Municipal Socialista de Torrevieja, dice que:

Disfrutar del verano con nuestras mascotas en las playas de Torrevieja es una realidad desde el Decreto del 23 de julio de 2018 por el que se declaraban áreas caninas Punta Margalla (en la zona centro de la ciudad) y la Cala del Malpaso (cerca de la Playa de La Mata).

El equipo de gobierno anterior atendía esta petición popular y modificaba, en primer lugar, la ordenanza municipal de uso, seguridad y conservación de las playas como el primer paso para que se pudiera destinar una parte del litoral para los perros acompañados por sus propietarios.

Las dos zonas de baño fijadas con perros eran de poco uso para baño por personas, por sus condiciones, por lo que se consideró que el impacto entre bañistas iba a ser mínimo.

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Anterior ubicación de la playa para perros en Torrevieja.

No obstante, una minoría de vecinos llevó a cabo protestas, caceroladas y acoso a los dueños de los canes, llegando incluso a retirar las señalizaciones instaladas.

Los cambios no son siempre del gusto de todos, pero sí debe ser el civismo y la convivencia en una sociedad que reclama compartir estos momentos e incluso viajar con su mascota cada vez más.

El viernes 5 de junio, por Decreto de alcaldía, se suprimen estos dos espacios y se habilita una única zona, Cala del Rocío, situada en la parte más sur de la ciudad.

El Grupo Municipal Socialista de Torrevieja echa de menos que no se haya planteado previamente este asunto entre toda la Corporación y querer conocer la opinión de la oposición. Y así, de forma unilateral, se toma esta decisión como últimamente viene realizando este gobierno del PP; todo sin consenso.

La nueva zona autorizada situada entre Lo Ferris y Rocío del Mar conforma una superficie de 1.670 m2, que equivaldría en tamaño a media plaza de la Constitución. Es evidente que el espacio es escaso y lejano para la mayoría de los ciudadanos y obligará a aquellos dueños de perros que deseen utilizarla a ir en coche, lo que va a suponer un inconveniente que echará a muchos usuarios atrás, desistiendo de este pequeño disfrute.

Por otro lado, el Grupo Municipal Socialista cuantifica en unos 12.000 m2 la superficie de las dos áreas anteriores, lo que da una idea de la escasa entidad de la nueva zona reservada para baño de perros.

De las dos zonas que ahora se suprimen, una se situaba en un lugar céntrico, Cala Margallo, a continuación de la playa del Cura, con una densidad de población elevada y consecuentemente con un gran número de personas con perros, que les venía, esta zona, accesible para ir paseando hasta ella con sus mascotas y disfrutar de un baño.

Anterior ubicación de la playa para perros en Torrevieja.

Por último, cabe recordar que el Partido Socialista de Torrevieja ya en su programa electoral contemplaba el tema de las playas caninas y lo hemos defendido siempre.

Es más, en esta legislatura ya planteamos una moción al pleno pidiendo reservar un gran espacio para recreo de los perros sueltos, al aire libre donde puedan interactuar con sus propietarios.

Este espacio lo centramos en el área comprendido entre la circunvalación de Torrevieja y las calles Portalicos, Urbano Arregui y Av. de la Estación: un espacio de unos 50.000 metros cuadrados, un lugar de dimensiones considerables, de titularidad municipal, céntrico y apto tanto para personas con o sin animales de compañía. Nuestra política socialista es completamente favorable a la normalización de la convivencia de la ciudadanía y sus mascotas, y a la adaptación de Torrevieja a las nuevas realidades.

Los Verdes de Torrevieja: Compromiso Municipal, denuncian la Alcaldada anti-canina en Torrevieja.

En un decretazo, redactado y publicado a espaldas de la ciudadanía y de la oposición, el alcalde ha eliminado las dos playas caninas localizadas en Punta Margallo (en el centro de Torrevieja) y en la Cala del Moro (situada al inicio de La Mata). Una vez más, Eduardo Dolón demuestra la actitud antidemocrática y nada dialogante con la que dirige el ayuntamiento.

Durante el mandato anterior, en el que se modificó la ordenanza correspondiente para poder legalmente disponer de un tramo de costa para el disfrute de mascotas y sus dueños, el PP insistió de forma vehemente en que se hiciese una consulta popular.

Decenas de usuarios de la playa para perros.

Pero con el decreto del actual alcalde, que deja sin efectos estas dos ubicaciones y al mismo tiempo autoriza una nueva playa canina muy alejada del centro de Torrevieja y en el extremo contrario a La Mata, queda claro que el PP no cuenta con la participación ciudadana.

Obviamente, esta decisión ha creado rechazo entre la ciudadanía, que ha expresado su decepción en las redes sociales y a través de recogidas de firmas.

Cediendo a las quejas de unas pocas personas, con la cancelación de las dos playas que representaban un espacio de convivencia y juego para las mascotas del centro urbano de Torrevieja y de La Mata, el alcalde ha dado un mal paso hacia la discriminación y la intolerancia.

El Auto del Juzgado de Elche que desestimó el recurso contra el decreto de la Alcaldía de Torrevieja de 25 de junio de 2018 sobre las playas caninas interpuesto por una comunidad de propietarios de la zona de la Cala del Moro, indicaba que “existe un interés general que es el que ha llevado al Ayuntamiento a la promulgación del decreto, para satisfacer una demanda de gran parte de los ciudadanos del municipio”.

Cala Rocío. Mojón que indica el limite territorial entre Torrevieja y Orihuela.


Dos años más tarde, el gobierno municipal del PP usa su mayoría absoluta para despreciar el interés general y para actuar como le viene en gana, lo cual no es novedoso.

Tampoco es ninguna novedad darse cuenta que no tienen muy desarrollado el respeto hacia los animales. No podemos olvidar que, antes de que Los Verdes crearan la Concejalía de Protección Animal en 2015, en la anterior etapa de Eduardo Dolón como alcalde (2011-2015), se sacrificaban, a espaldas de la población, una media de 300 animales al año en lo que era antes la perrera municipal. Esto es clave para entender la actitud del Partido Popular en lo que a “protección animal” se refiere.

Los tiempos actuales exigen que los pueblos con costa ofrezcan playas para el uso y disfrute de perros. Más si cabe, en Torrevieja, que vive del turismo y que en años anteriores había empezado a convertirse en una ciudad petfriendly.

Eliminar de un plumazo dos playas caninas que han estado siendo utilizadas por una cantidad importante de propietarios de perros, residentes y turistas, simplemente es antidemocrático por más que quieran vender que la nueva ubicación será paradisíaca con un montón de servicios.

Pero resulta que los perros no precisan de ningún servicio. Con un trozo de playa les sobra.

Zona rocosa de la playa para perros en Cala Rocío.

A continuación expongo el motivo por el cual es tan importante contar con una playa céntrica a la que puedan caminar aquellas personas que viven con sus mascotas en pisos en el centro de Torrevieja: lamentablemente en el centro del pueblo no existe ni un solo parque específico ni una zona acotada en la que un perro, cuya condición física lo requiere, pueda correr y desfogarse y quemar energía, algo muy importante para el bienestar del animal.

El ejercicio físico diario es imprescindible para que se encuentren tranquilos y equilibrados el resto de día. De no estarlo, su comportamiento puede causar problemas al propietario y molestias a sus vecinos. Y este es uno de los motivos más frecuentes de abandono. En otras palabras: tener acceso a una zona de libre esparcimiento reduce los abandonos de mascotas.

Nadie debería estar en desacuerdo: poder contar con dos opciones de playas caninas era un progreso. Eliminar esas dos y elegir una que está lindando con la frontera de Orihuela Costa es un paso negativo hacia atrás. Además, contribuirá a aumentar la circulación de coches en una zona saturada de tráfico.

Aunque la ubicación nueva no nos desagrada, y así lo decimos abiertamente, lo correcto hubiera sido añadirla como la tercera opción de esparcimiento canino situada en la parte sur del municipio.

Consideramos que ceder a las quejas de unas pocas personas perjudica a muchas más personas y a sus mascotas. Más que unos ladridos esporádicos, los perros no pueden haber causado molestias reales a los vecinos donde estaban las dos playas caninas suprimidas.

Estamos seguros que ha primado la aversión de unos pocos en contra de los animales en general antes que la libertad y el respeto a la naturaleza y al medio ambiente.

playa para perros en Torrevieja pets friendly dogs beach

Haber sumado a las dos playas caninas autorizadas la tercera en la Cala Ferris hubiera hecho Torrevieja destacar de una manera muy positiva. Pero la alcaldada de Eduardo Dolón, en vez de sumar, resta. Muchas páginas webs que publicitan Torrevieja como destino turístico petfriendly destacado por contar con dos playas caninas deberán, lamentablemente, modificar esa información.

Desde Los Verdes defendemos los derechos de los humanos y luchamos también por los derechos de los animales. No debemos permitir que las administraciones eliminen derechos ya adquiridos, además con mucho esfuerzo. Meditaremos la opción de recurrir a este decreto, e invitamos a todos aquellos que igualmente estén en contra a poner de manifiesto su disconformidad. Si quieren pueden contactarnos: losverdes@torrevieja.eu.

La plataforma Salvemos Lo Ferrís pide al Ayuntamiento
que rectifique el traslado de la playa canina

  • El cambio a Cala del Rocío, sin previo aviso, genera malestar y confusión entre los usuarios y será fuente de conflictos a las puertas de un verano ya de por sí complicado, marcado por medidas de control por el coronavirus.
  • La medida supondrá una agresión al hábitat, por lo que es una prueba más del abandono y la presión social y ambiental que sufre el litoral sur del municipio.
  • SLF reclama el mantenimiento adecuado de las palmeras que se encuentran en tierra de nadie. Se constata la caída de varios ejemplares.

El debate de las playas caninas ha sido fuente de discusión en Torrevieja en los últimos años. Las dos zonas habilitadas hasta ahora se aprobaron en 2018, tras tres años de consultas. Sin embargo, en la recta final del confinamiento por la pandemia, un nuevo decreto ha suprimido las áreas aptas para perros en la Cala del Moro y Punta Margallo, que sumaban 12.000 metros cuadrados, para permitir el baño en Cala del Rocío, una superficie de 1.670 entre Cala Ferrís y Rocío del Mar.

De forma unilateral, sin tan siquiera mencionar esta intención de cambio, el decreto con fecha del 28 de mayo y previamente firmado el 21 de abril por el propio alcalde, Eduardo Dolón, nunca se hizo público hasta que se conoció el pasado 5 de junio después de publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia.

Si bien hace unos días el primer edil justificaba que la medida es para evitar enfrentamientos entre bañistas y vecinos, lo cierto es que, lejos de esta intención, se ha generado aún más polémica. Por las formas, haciéndolo sin previo aviso y en plena pandemia, y por el fondo: reducción de la zona de baño para canes y su desplazamiento a un tramo de costa rocoso al sur del municipio.

Esta falta de transparencia e información está generando confusión entre los usuarios. Muchos de ellos se están dirigiendo a Cala Ferrís. Incluso, hay quien cree que es en Cala Piteras, junto al Nautilus.

Salvemos Lo Ferrís manifiesta que situar una playa de canes en una zona virgen, tapando con tierra el litoral e instalando cartelería e infraestructuras, tal y como ha anunciado el alcalde, supone una agresión más a un paraje que soporta una presión ambiental y social asfixiante.

Con esta decisión se ignora, una vez más, su valor ambiental. En este tramo de costa se pueden observar garcetas cangrejeras, zarapitos trinadores, cormoranes, correlimos, gaviotas de Audouin y paiños, además de la flora específica del litoral como el limonium, algún taray, distintas sosas y cambrones. La presencia masiva de perros haría que estas especies abandonen su hábitat natural.

Por eso, Salvemos Lo Ferrís pide a las autoridades que rectifiquen y se replanteen esta nueva ubicación, ya que provocará un daño en el entorno y seguirá siendo fuente de conflictos, y considera que es mejor mantener las dos zonas que ya funcionaban o, al menos, abrir otra ronda de consultas con todos los afectados para determinar un lugar que dé un buen servicio a esta finalidad sin generar perjuicio alguno a usuarios con y sin mascotas. En este sentido, la Asociación recuerda que el anterior decreto buscó la negociación y el consenso e incluso estuvo ratificado por una sentencia judicial.  

Sin duda, es un cambio polémico que añadirá más estrés a un verano que ya de por sí estará marcado por medidas de control y espacios de baño más reducidos.

Salvemos Lo Ferrís, como ya dijo hace cuatro años cuando comenzó a plantearse el debate, reitera que respeta a todos los usuarios y mascotas, pero este paraje no debe soportar más presión ambiental y social.

Tampoco debe soportar más presión el litoral sur del municipio, desde Mar Azul al cabo de Punta Prima, una zona habitualmente olvidada y saturada: es una de las áreas donde más se está construyendo en los últimos tiempos sin invertir en servicios. A las seis torres azules se sumaron el año pasado otras cuatro y este año han comenzado a levantar otras tantas, que encapsulan los restos protegidos del refugio de la guerra civil. De seguir así, se podría llegar a un colapso.

Salvemos Lo Ferrís señala que Ferrís sufre un maltrato constante. Este abandono se constata, una vez más, en un muro que estrangula la flora y la fauna del lugar y que causa estragos en situaciones extremas como la última DANA, impidiendo el desagüe de las lluvias torrenciales.

Pero sobre todo se comprueba en la caída de varias palmeras en los últimos meses por falta de cuidados, pese a que las que miden más de 12 metros están protegidas según la normativa de árboles singulares de la Comunitat Valenciana.

Algunos ejemplares sufren la desidia de unos y otros. Se encuentran en tierra de nadie; esto es, en la servidumbre de paso, la zona entre el dominio público y la propiedad del terreno colindante. Según Costas, esos seis metros de paso siguen siendo responsabilidad del propietario de la finca, por lo que Salvemos Lo Ferrís prepara un escrito dirigido al Ministerio para la Transición Ecológica para que requiera al propietario un mantenimiento oportuno, así como otro escrito a Costas para que retire la mimosa invasora que está proliferando en las dunas.

Estas acciones, recuerda la Asociación, son la continuación de su defensa de un uso público y de carácter variado, donde puedan convivir las diferentes maneras de disfrutar del ocio recreativo y natural.


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